Había una vez en Liberté, en las afueras de una ciudad lejana en los confines del planeta, un lugar lleno de esperanza y sueños, donde las personas privadas de la libertad encontraron un refugio para su transformación. En medio de ese entorno, nació una historia maravillosa: la historia de nuestra querida biblioteca.
Todo comenzó con un gesto generoso de Luis Becedillas, quien donó los primeros libros. Eran libros adventistas que encontraron su lugar en un pequeño estante. Pero pronto nos dimos cuenta de que necesitábamos más. La biblioteca del penal no siempre estaba disponible, así que decidimos crear nuestra propia biblioteca, un espacio donde el conocimiento y la imaginación pudieran florecer.
Un día, una visita sorprendente llegó a Liberté. Eran los miembros del barco Logos Hope, trayendo consigo un tesoro: alrededor de 500 libros nuevos. Fue un momento de alegría y emoción, y decidimos llamar a nuestra biblioteca "Liberté Logos Hope". Con estos nuevos libros, dimos forma a nuestro sueño y comenzamos a compartirlo con todos.
La noticia se extendió y algo maravilloso sucedió. La gente comenzó a donar libros, sumando su granito de arena a nuestra biblioteca. Pronto, nuestra colección creció y creció, superando los 3500 libros. Cada libro era un tesoro, una puerta a nuevos mundos y experiencias.
Pero nos dimos cuenta de que no todos podían acceder a estos tesoros literarios. Algunas personas privadas de la libertad y miembros de Liberté podían disfrutar de ellos, pero queríamos llevar la magia de la lectura a todos los rincones. Así nació la idea de la biblioteca móvil, una forma de llevar los libros a cada pabellón, rompiendo barreras y compartiendo el poder de la lectura.
Algunos dudaron de esta iniciativa, temiendo que los libros fueran robados y perdidos para siempre. Pero confiamos en la buena voluntad y el respeto de todos. Después de un mes, hicimos un recuento de los libros y nos llevamos una gran sorpresa: en lugar de perderlos, ¡habíamos ganado más! Los presos devolvían los libros que les llevábamos y, además, donaban aquellos que ya habían leído y que sus familias les habían traído. Fue un gesto conmovedor que demostró el verdadero valor de la lectura y la solidaridad entre nosotros.
Pero la historia de nuestra biblioteca no acaba aquí. Hay más por contar, más por descubrir. Cada día, seguimos agregando libros a nuestras estanterías, alimentando el deseo de conocimiento y crecimiento de nuestra comunidad. Cada vez que alguien encuentra un libro que le inspira, un libro que le transporta a otro lugar, sabemos que estamos cumpliendo nuestro propósito.
La biblioteca de Liberté no solo es un espacio físico lleno de libros, es un reflejo de nuestra determinación por construir un futuro mejor. A través de la lectura, exploramos diferentes mundos, aprendemos lecciones valiosas y nos conectamos con nuestras propias historias. Es un lugar donde las palabras cobran vida y nos llevan más allá de los muros de la prisión.
Soñamos con un futuro en el que las personas privadas de la libertad, al recobrar su libertad, se conviertan en vecinxs. Para lograrlo, apostamos al trabajo, la educación y la lectura como herramientas transformadoras. Buscamos vivir nuestra experiencia tras las rejas con dignidad, exigiendo que se respeten nuestros derechos, aquellos que la justicia no nos ha quitado.
En cada página que leemos, en cada palabra que compartimos, nos acercamos un poco más a ese futuro anhelado. La biblioteca de Liberté es un símbolo de nuestra lucha por la igualdad, la justicia y la inclusión. A través del acceso a la educación y el conocimiento, buscamos romper barreras y construir puentes hacia un mundo en el que todxs tengamos las mismas oportunidades.
La biblioteca de Liberté es un recordatorio de la resiliencia y el deseo innato de crecer y superarse. Es una historia de esperanza y superación que nos muestra que, incluso en los lugares más oscuros, el amor por la lectura puede iluminar el camino hacia la redención.
En definitiva, la historia de la biblioteca de Liberté en la cárcel de máxima seguridad de Batán es una historia real y poderosa. Es una historia de lucha, transformación y esperanza. Nos recuerda que el conocimiento y la educación pueden abrir puertas y construir puentes hacia un futuro mejor.
Esta biblioteca no solo existe, sino que funciona y está autogestionada por nosotros, los presos.
¡Bienvenidxs a la biblioteca de Liberté, donde los sueños encuentran su voz y lxs presxs encuentran su camino hacia la integración!